miércoles, 30 de abril de 2008

ESTO AVANZA...

A punto de entrar en el mes de mayo, podemos anunciar a día de hoy que ya disponemos de la versión definitiva de la música del corto, por lo que estamos viendo ya la luz al final del túnel. Si todo va bien, el próximo lunes 5 de mayo dispondremos ya de la mezcla definitiva de la música, que espero sea incorporada y mezclada junto a la postpo de sonido de forma definitiva durante la próxima semana.

Así las cosas, estamos trabajando para poder disponer de los masters definitivos el lunes 12 de mayo, en la exportación que tenemos previsto realizar en Utopic. De esta manera, espero poder cumplir mi pronóstico y llevar a cabo el estreno del corto antes de la finalización del mes de mayo.

Un estreno que estamos preparando por todo lo alto, por lo que ya podéis ir buscándoos un buen traje/vestido a la altura de la alfombra roja que dará paso a algo más que una premiere de cine. Pero de esto ya hablaremos más adelante...

(Continúa en SE BUSCA LOCAL)

lunes, 21 de abril de 2008

BANDA SONORA ORIGINAL

De la misma forma que el sonido, la música también es pieza clave del corto. Su papel es fundamental para conseguir el efecto anímico deseado en el espectador. La teoría la sabíamos, y parecía fácil, pero para dos “grandes entendidos musicales” como Marc y yo (los que me conocéis seguro que sabéis de mis eclécticos gustos musicales), se nos antojaba ardua la tarea.

Lo que teníamos claro era la canción de los créditos finales, una canción de Combustible Edison titulada Miniskirt, así que muy disciplinadamente me dispuse a averiguar el protocolo a seguir para poder utilizar un canción en el corto. No sabía donde me metía. Menudo rollo. Tanto que no quiero inflaros la cabeza y lo resumiré rápidamente: a tomar por culo las discográficas y el paripé de los derechos audiovisuales. Después de mil llamadas, y más de tres meses de espera, me contestan pidiéndome 500 euracos por utilizar la canción. Una canción que no conoce ni Dios… Y para un jodido corto… A cagar con la canción. Con dos cojones, la compondríamos nosotros.

Paralelamente a todo este jaleo, Marc y Riera (en funciones de Ambientador Musical), diseñaron el esquema musical del corto, que debía servir para ayudar a la compositora a trabajar con la ideas más claras. Mabel, nuestra compositora, se puso manos a la obra y a partir de nuestras peticiones fue gestando las diferentes músicas que debían poblar el corto.

Dado que ella estaba bastante atareada con todo esto, y una vez mandamos a paseo a las discográficas, la composición de la canción para los títulos de crédito se la encargamos a Rafel, otro compositor al que también enredamos para que nos echase una mano y poder agilizar así todo el proceso.

Las primeras composiciones fueron apareciendo, y entre unas cosas y otras no acabábamos de verlo claro. Nos costaba explicar lo que queríamos, y sólo acertábamos a decir si nos gustaba o no. Para flipar con la cara de los compositores cuando intentábamos explicarnos sin explicarnos. De verdad, muchas gracias a los dos por aguantar nuestra incompetencia musical.

De todos modos, de todo se aprende, y a base de repetir varias veces la fórmula del ensayo-error, llegamos a una versión de la BSO que nos gustó. Utilizando algunas composiciones de Mabel y otras de Rafel, y a base de probar con cincuentamil tipos diferentes de baterías, guitarras y otros tropocientos instrumentos más que ni tan sólo sabía que existían, tenemos en estos momentos un BSO que está muy cerca de ser la definitiva. Con unos retoques más, es posible que en 2 semanas esté acabada. Ya queda menos…

(Continúa en ESTO AVANZA...)

martes, 15 de abril de 2008

EL SONIDO DEL SILENCIO

“Una imagen vale más que mil palabras”. No hay frase que enerve más a un técnico de sonido. Y a pesar de ser como son (el tema de los técnicos de sonido merece una entrada a parte), creo que llevan parte de razón. En cualquier producto audiovisual, tanto la imagen como el sonido tienen un peso esencial en el resultado final, y más que verlos como enemigos, hay que entenderlos como compañeros complementarios que otorgan al conjunto su valor real. El uno sin el otro no serían nada. Y esta ha sido desde el primer momento nuestra apuesta. Y más en este corto, donde sin duda, el sonido tiene un papel más que protagonista en toda la historia.

Es por ello que le hemos dedicado un gran esfuerzo a crear una banda sonora que potenciara la narración visual. Esfuerzo que se inició ya en la captación del sonido en directo, donde nos encontramos con multitud de problemas que muy eficazmente solventaron como buenamente pudieron Sergi, Ramón y Gerard. Es alucinante cómo el más mínimo ruido que se cuela puede arruinar una toma. Incluso tuvimos que inventarnos caseros amortiguadores de ruidos para poder grabar sonido de algunos planos.




De esta guisa se tuvo que ver Ramón para que al caminar mientras seguía el movimiento de un personaje sus pasos no se colasen. Así que si por chorradas de este tipo las pasábamos putas, imaginaos como debía ser rodar al lado de una carretera nacional de un pueblo de costa en pleno verano (espera, que ahora pasa un coche; espera, que ahora es una moto; vale, rodando que ahora… ahora… ahora, ¡me cago en la leche!, corta, que pasa una ambulancia).

Teniendo en cuenta que el sonido ambiente de nuestra historia debía ser básicamente el de un silencio inquietante, se hacía difícil pensar en cómo íbamos a lograr eliminar semejante estruendo sonoro. Pues señores, yo todavía estoy flipando por cómo es posible que todos los ruidos provocados por coches, ambulancias y gente que pasaron por delante del rodaje en su día se hayan esfumado de la banda sonora final. Gracias al arte de Sergi al mando de un milagroso software de postproducción de audio llamado Nuendo, no sólo consiguió lo imposible, sino que creó el silencio inquietante que buscábamos, un silencio que suena, un silencio que se deja oír, que está presente y que confiere al espacio en el que transcurre la historia su propia personalidad sonora. El sonido del silencio.


(Continúa en BANDA SONORA ORIGINAL)
(Viene de EL ETALONAJE)


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